[#PorQuéTeGustará] Graveyard Keeper: el arte de gestionar a los muertos

Todo en esta vida se acaba. Vale, puede que no sea la mejor forma de empezar mi última review, pero es así. Los libros de más de 2.000 páginas, las series de 15 temporadas e incluso los RPG de más de 150 horas acaban terminando. Y, evidentemente, la vida en algún momento llega a su fin. Vale, puede que esté exagerando porque todo el mundo sabe que Jordi Hurtado es inmortal y seguirá presentando Saber y Ganar hasta el día del juicio final.

Es precisamente de eso de lo que os vengo a hablar en esta ocasión tan especial. No de presentadores que no envejecen, sino de la muerte. O, más bien, de la gestión de cadáveres. De la mano de Lazy Bear Games tenemos para Nintendo Switch la edición en físico de Graveyard Keeper.

¡Bienvenidos al medievo!

Un inicio atípico

Nada más empezar el juego, Graveyard Keeper nos lanza delante de un coche… o debajo, no lo tengo muy claro. El caso es que nuestro protagonista es un hombre que vive tranquilo y enamorado de su pareja en una época contemporánea. Hasta que un accidente nos manda varios siglos atrás. Lo primero que se nos pasa por la cabeza es: ¿estaré muerto? O a lo mejor estoy soñando. O puede que esto sea lo que hay al otro lado. ¿Os imagináis que cuando muriésemos fuéramos a parar dentro de un videojuego? ¡Sería genial!

Sin mucho tiempo para indagar nada, se nos presenta Gerry, un cráneo borracho que habla y va dando saltitos. Este personaje será nuestro más fiel compañero en esta aventura ya que nos hará compañía y nos ayudará en todo momento. ¿Os he dicho ya que nuestro oficio será el de enterrador? Bueno puede que el título del juego os haya dado alguna pista. Parece ser que nuestra función será la de hacer la autopsia a los cadáveres que nos llegan diariamente mediante un burro que habla (todo muy normal). Y procurar que, tanto el cementerio como la iglesia de la que estamos al cargo, vuelvan a tener el esplendor de antaño.

Vida social

El juego no te cuenta mucha cosa. No sabemos cómo hemos acabado ahí y nuestro dos únicos amigos no sueltan mucha prenda. Pero no todo se reduce a enterrar muertos. En la época medieval también había que socializar y el hecho de no tener Instagram ni WhatsApp hace más difícil hablar con la gente desde el sofá de tu casa. Así que toca ir al pueblo (siempre hay un pueblo).

En él encontraremos al herrero, los comerciantes y la taberna. Como digo, el juego no te marca una ruta la cual seguir. Y las misiones que nos dan algunos NPC no las podremos completar hasta haber realizado ciertas cosas. Así que mi consejo es el siguiente: hablad con todo el mundo que tenga una exclamación en la cabeza, intentad contentarles y, poco a poco, veréis como todo se va completando.

Mucho por hacer en mucho tiempo

Graveyard Keeper es un pozo de horas. Podremos dedicarnos solo a limpiar de árboles, piedras y ramas el entorno. Esto nos dará materiales para reconstruir ciertas ubicaciones y también una clase de moneda de diferentes colores que nos sirve para conseguir mejoras en el árbol de habilidades. ¿No os lo había mencionado? Pues sí, el juego de Lazy Bear Games ofrece más de 5 árboles de talentos. En ellos encontraremos recetas de cocina, el poder quitar más miembros de un fiambre (cerebro, intestinos, etc.) o el construir ciertas edificaciones. Esto nos irá genial para avanzar y tener más variedad a la hora de hacer cosas en nuestro terreno.

La idea del juego es mejorar tanto nuestra parcela, como la iglesia en sí. Esta se encuentra cerrada al principio de todo, pero en poco la abriremos y podremos congregar a los feligreses a una misa que impartiremos nosotros mismos.

El humor es indispensable

Aunque pueda tratarse de un título un tanto extraño a simple vista, ya que tocar el tema de la muerte y los cadáveres, no lo es en absoluto. Graveyard ofrece una jugabilidad muy pausada y tranquila, aunque siempre tendremos que estar atentos a nuestra estamina para no desfallecer en mitad de la nada y a qué día de la semana es para acudir a ciertos eventos. Uno de los puntos en el cual destaca mucho es en su humor un tanto oscuro y sutil en algunos momentos. No podía ser que fuese todo tan serio y siniestro ¿verdad?

Cargada de expansiones

La edición que tenemos disponible en GAME es la Undead Edition, que nos incluye 3 DLCs a cual más divertido:

• Breaking Dead, el cual nos ofrece la oportunidad de emplear las técnicas nigrománticas para levantar un ejército de zombis para que nos hagan las tareas… Una decisión lógica ya que tenemos un montón de mano de obra gratis durmiendo bajo nuestros pies.
• En Game of Crone deberemos ayudar a un campamento de refugiados mientras investigamos una amenaza vampírica. Que pena, por el nombre pensaba que habría dragones e incesto por todas partes.
• Y Stranger Sins nos introducirá en el fantástico mundo de regentar una taberna. Lidiar con borrachos siempre puede ser divertidamente desesperante.

Graveyard Keeper nos regala una fantástica aventura pixelada de gestión de cementerios un tanto loca, disparatada y muy divertida. Preparaos para horas y horas de picar piedra, cortar filetes de persona humana y dar sermones medianamente creíbles para que la gente deje limosna en el cepillo.

Si sois fans de títulos como Stardew Valley, este videojuego es para vosotros sin ninguna duda. Yo lo he disfrutado muchísimo y pienso seguir haciéndolo. No todos los días se hace uno enterrador. Podéis haceros con él en cualquiera de nuestras tiendas GAME o bien en nuestra página web.