El que más y el que menos ha tenido la oportunidad de jugar a algún título de Sonic. Y aquí no hay discusión: o te gustan, o no. Pero si te gustan… Te verás enganchado de por vida. Y cualquier nuevo título que se lance, vas a querer echarle el guante, no nos engañemos. Por lo que, al igual que yo, cualquier fan del erizo azul que viera el primer tráiler de este Sonic Superstars, sintió como algo que llevaba dormido en su interior durante unos largos meses (tras el lanzamiento del genial Sonic Frontiers), se despertaba. Así que, durante las próximas líneas, vamos a contaros qué nos ha parecido esta nueva entrega.
Las 2D están de vuelta, amiguete
Bueno, siendo totalmente sinceros, nos encontramos ante un juego de plataformas en 2,5D. Lo que significa que, pese a su desplazamiento lateral, el personaje se trasladará también a zonas que se encuentren al fondo de la pantalla. Y esto se traduce en mucha más acción y velocidad.
Podremos tomar el control de uno de los cuatro personajes principales de la saga (aunque aparecerán otros personajes disponibles más adelante), como son el propio Sonic, Tails, Knuckles y Amy. Cada uno de ellos con sus propias habilidades que ya conocemos cualquier fan de la saga. Y nos sorprenderá ver que los niveles están preparados para que podamos utilizar cualquiera de ellos.
El diseño de niveles nos ha parecido excelente, como ya nos tienen acostumbrados los miembros del Sonic Team. Las fases son enormes, llenas de caminos alternativos y con peligros a cada paso. No penséis que esto consiste solo en avanzar a toda velocidad sin preocuparse de lo que venga por delante. Habrá que andar con mil ojos. Por no hablar de partes de auténtico plataformeo que nos obligaran a medir cada salto.
Aquí es cuando tenemos que hablar del control, el cual está muy pulido y nos va a permitir mover a nuestro personaje justo la distancia que deseemos. Y, si sale algo mal, sabremos que el fallo ha sido nuestro, no de un error de movimiento de la animación: se acabaron las excusas. Incluso cuando saltemos o nos encontremos en momentos de las fases en la que nuestro personaje esté en caída libre, tendremos total sensación de control sobre él.
Los malos malosos la están liando
Como es costumbre en la saga del erizo azul, en Sonic Superstars nos enfrentaremos de nuevo al Dr. Robotnik, pero en esta ocasión no estará solo, sino que tendrá como aliados en su bando a Fang y Trip: dos enemigos algo torpes pero que no van a dudar en ponernos las cosas bastante difíciles.
Para destruir a nuestros enemigos contaremos, aparte de con los poderes que ya conocemos de los protagonistas, con las esmeraldas del caos, las cuales nos van a proporcionar movimientos especiales cuando las usemos, pero, para ello, primero tenemos que conseguirlas, obviamente. Lo haremos a través de fases especiales, a las que accederemos mediante anillos gigantes que encontraremos a lo largo de las fases. Y, a diferencia de otros títulos de Sonic, esta vez las esmeraldas serán un poco más fáciles de conseguir.
Este Sonic Superstars no pretende ser para nada un juego difícil. Nos va a proporcionar muchas ayudas para superar múltiples momentos que, a priori, pueden parecer difíciles como son las fases para conseguir las esmeraldas (donde prácticamente solo tendremos que usar un botón), los poderes de dichas esmeraldas (que serán muy útiles para acabar con los jefes) e incluso el hecho de que, a diferencia de otras entregas, no tendremos un recuento de vidas, por lo que podremos morir infinidad de veces tratando de superar una parte de un nivel o un jefe y no seremos penalizados.
Los apartados artístico y musical son una maravilla
Aquí no vamos a encontrar muchas sorpresas, ya que la estética de Sonic Superstars no nos trae nada nuevo que no hayamos visto antes en otras entregas, a excepción de algunas animaciones y movimientos, claro está, pero no estaremos ante nada innovador a nivel visual.
Algo parecido ocurre con la banda sonora, ya que nos presentarán unas melodías que nos transportarán sin ningún reparo a los clásicos juegos de Sonic como pueden ser Sonic 2 y Sonic 3 e incluso a Sonic Spinball, ya lo veréis.
Entonces, Sonic Superstars, ¿merece la pena?
Nos encontramos frente a una entrega que trata de innovar en algunos aspectos, y partes puntuales. Pero, en resumen, nos encontramos ante una entrega más de Sonic. Las novedades se agradecen, pero no nos hacen sentir que estemos ante algo rompedor. Aun así, el hecho de no sentirnos ante algo muy novedoso también es reconfortante. Podríamos decir que estamos ante lo que sería una suerte de Sonic 5, algo que también nos gusta.
Los que hemos crecido con el erizo azul y compañía, vamos a encontrar en Sonic Superstars un título que nos va a transportar a esas tardes con la Mega Drive y un sándwich de mortadela. Así que, si eres fan de Sonic, mi consejo es que no dudes en darle una oportunidad. Y si ya conseguimos a tres amigos más dispuestos a desatar la locura en este título, la diversión estará más que asegurada.
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